Rendimiento físico: qué es y cómo mejorarlo 

En este artículo vemos qué es el rendimiento físico, qué tipos de factores influyen en él y algunos consejos para mejorarlo. 

Qué es el rendimiento físico

El rendimiento físico es una expresión distinta de muchos de los conceptos más amplios de las ciencias del deporte, como la salud, el estado físico o la longevidad. El rendimiento físico describe los esfuerzos realizados por un deportista para lograr objetivos de rendimiento específicos durante un período de tiempo. 

El talento natural o la forma física del deportista afectarán el nivel de rendimiento. Esto incluye no solo la evaluación de un resultado particular, sino también el concepto de recuperación. Uno  de los factores más importantes en el rendimiento tiene que ver con la rapidez con la que un deportista puede volver al entrenamiento o a la rutina regular. Esto se debe a que la recuperación dictará cómo el deportista puede prepararse para el próximo evento.  

Factores que influyen en el rendimiento deportivo 

El rendimiento deportivo tiene cuatro aspectos distintos, cuatro áreas que incluyen factores neuromusculares, control mental y factores psicológicos, condiciones ambientales; y el coaching y apoyo externo al deportista.

Factores neuromusculares

Los factores neuromusculares que afectan el rendimiento deportivo suelen ser los más completos y representan aquellos aspectos del rendimiento que ocupan el mayor grado de concentración y tiempo de preparación.  

El componente neuromuscular del rendimiento deportivo se subdivide en varios elementos que deben ser objeto de enfoques de entrenamiento específicos. Estos son:

• Tipo de cuerpo (somatotipo). 
• Fuerza muscular, tanto en términos de masa muscular como de potencia muscular.  
• Resistencia 
• Flexibilidad 
• Capacidad del cuerpo para responder a estímulos externos en el deporte (incluyendo el tiempo de reacción)
• Agilidad, equilibrio y coordinación
• Velocidad

Control mental y factores psicológicos

El control mental y los factores psicológicos relacionados con el rendimiento deportivo son intangibles, y se reflejan en el resultado final del esfuerzo del deportista. En muchos aspectos, los elementos mentales del deporte son los más difíciles de dominar. Esto se debe a que, por lo general, requieren un alto nivel de experiencia y madurez.

Este desarrollo del control mental y emocional puede examinarse desde varias perspectivas, e incluye:

• inteligencia, capacidad lógica y analítica 
• capacidad de automotivación  
• disciplina

Factores ambientales

Los factores ambientales no suelen estar bajo el control del deportista. Por eso, su capacidad para adaptarse a factores ambientales inesperados suele ser determinante para su rendimiento. 

Hay factores ambientales importantes que pueden afectar el éxito, tanto positiva como negativamente. De ahí la importancia de prepararse y conocerse bajo diferentes condiciones ambientales. 

Coaching y el apoyo externo

El coaching y el apoyo externo son tan importantes como cualquier factor en el rendimiento deportivo. De hecho, puede llegar a ser determinante, especialmente en deportistas jóvenes.

En general, igual de necesario es que un entrenador se ocupe de los aspectos técnicos del entrenamiento como de apoyos emocionales del deportista. 

Cómo mejorar el rendimiento físico

A la hora de buscar estrategias para mejorar el rendimiento físico hay que tener en cuenta todos los factores que influyen. En cualquier caso, por lo general, se podrán tener en cuenta las siguientes estrategias para mejorar:

Variar los entrenamientos

Para mejorar la fuerza muscular, el tiempo de respuesta y la destreza mental, los ejercicios funcionales son una gran base y deben formar parte de los entrenamientos. Esto no solo ayuda a entrenar de forma específica para el deporte, sino que amplía la gama de movimientos y ofrece diferentes estímulos al cuerpo para una mayor eficiencia y un desarrollo más armónico y completo. 

Seguimiento de los avances  

Realizar un seguimiento de los avances permitirá analizar cómo mejora el rendimiento y en qué condiciones. Del mismo modo, si el rendimiento se estanca o, incluso, remite, aunque sea un poco, se podrá determinar qué puede estar ocurriendo para tomar medidas al respecto. 

Hidratación adecuada

La hidratación es prioritaria en cualquier entrenamiento. Y deshidratarse es fácil. De ahí la importancia de buscar formas adecuadas de hidratación que no solo no afecten al rendimiento, sino que puedan impulsarlo de la manera correcta. 

Recuperación

El proceso de recuperación es tan importante como el propio entrenamiento. Por una parte, ayuda a evitar lesiones debido al cansancio o al sobreuso. Por otra, favorece la recuperación y reconstrucción del tejido muscular, así como su crecimiento. 

Nutrición específica

Mejorar el rendimiento deportivo puede ser tan simple como comer los alimentos adecuados, según el tipo de entrenamiento o las necesidades de cada etapa. Esto incluye no solo comer lo más adecuado, sino en el momento adecuado. 

El rendimiento deportivo hoy pensando en el mañana

A la hora de apostar por el rendimiento deportivo hay que tener en cuenta que nuestro cuerpo nos tiene que durar mucho tiempo, así que preferiremos tenerlo en buen estado. De ahí la importancia de cuidarlo y, a la hora entrenar duro para mejorar el rendimiento, tener en cuenta que también tenemos que cuidarlo y no “machacarlo”. Es posible maximizar el rendimiento sin sacrificar la salud física del futuro.

Eva María Rodríguez Diego

Estudió Magisterior con especialidad en Educación Física en la Universidad de Salamanca. Entrenadora personal e instructora de yoga. Especialista en deporte escolar y en actividades físicas para personas mayores.